Una segunda mirada al Laboratorio de Ecosalud y Ecología Urbana con Benny Martinez
Es momento de conocer a Benny Martinez, egresada de la carrera de Biología y actual tesista en el Laboratorio de Ecosalud y Ecología Urbana.
Desde que inició la carrera, en el 2016, se sentía orientada hacia la ecología y conservación. Sin embargo, hay un número de experiencias acontecidas en los últimos años que la marcaron y condujeron a su enfoque actual: conservación de ecosistemas, megafauna marina y desarrollo de pesca sostenible.
Participó del Programa Punta San Juan que se centra en la conservación de ecosistemas marinos, y también ingresó a GEECO, organización focalizada en ecología, evolución y conservación, en la cual actualmente se desempeña como parte de la junta directiva.
Además, antes de ingresar al Laboratorio de Ecosalud y Ecología Urbana, perteneció al Laboratorio de Biología Marina y al Laboratorio de Estudios en Biodiversidad, pero se dio cuenta que las actividades realizadas en los dos últimos, lamentablemente, no eran actividades a las que quería dedicarse a largo plazo. “Saber qué cosa no te gusta es igual de importante que identificar lo que sí. Por eso, no deben tener miedo a probar diferentes áreas. Estos dos laboratorios me ayudaron a que determinará a dónde quería dirigirme como bióloga”, añadió.
Benny Martinez
El Laboratorio de Ecosalud y Ecología Urbana aparece en su vida
De esta manera, guiada por una de sus mejores amigas, que se había unido al Laboratorio de Ecosalud y Ecología Urbana, decidió contactar al Dr. Armando Valdés. “Todos los días, después de clases, lo esperaba para hablar con él. Un día me acerqué y le pregunté si podía unirme a su laboratorio para ver como era. Fue así que encontré lo que más me gusta”, comentó.
“Cada laboratorio tiene diferentes formas y criterios para aceptar a sus participantes. Algunos son más estrictos que otros. En el caso del Laboratorio de Ecosalud y Ecología Urbana, diría que es bastante directo. Buscan a personas responsables, proactivas y con muchas ganas de trabajar”, explicó Benny al preguntarle acerca del perfil requerido para ingresar al laboratorio. “Lo que más valoro es el trato horizontal entre los investigadores y los estudiantes. Podemos conversar y pedir ayuda con confianza”, añadió.
Benny nos contó que el laboratorio es multidisciplinario y que ven áreas cómo epidemiología, cambio climático, conservación, planeamiento urbano, etc. “Hay muchos proyectos que se están llevando a cabo y en caso de estar interesado en alguno, solo nos contactamos con la persona encargada, nos enseñan la metodología y nos capacitan”, mencionó.
Benny dentro del laboratorio y su aprendizaje
Antes de la pandemia los estudiantes iban todos los días después de terminar clases a apoyar, pero actualmente se reúnen por Zoom y a lo largo de la semana se dedican a trabajar en los proyectos. Un día a la semana se realizan reuniones de logística, en las se juntan todos y se comenta acerca de los avances realizados.
Benny ha podido desarrollar mejor algunas habilidades y reforzar su crecimiento personal y profesional, a partir de su involucramiento en el Laboratorio de Ecosalud y Ecología Urbana. Al respecto comentó lo siguiente:
“He aprendido a comunicarme mejor con otras personas, principalmente a compartir mis ideas sin temor. En el laboratorio te dan la confianza de que no hay opinión errónea y que puedes decir libremente lo que piensas”.
Pescadores artesanales y lobos marinos
A primera vista, cualquiera pensaría que la conservación se centra únicamente en el cuidado de las especies; sin embargo, es más que solo eso, también se debe involucrar a las comunidades humanas. Por esta razón, Benny decidió estudiar las interacciones entre pescadores artesanales y lobos marinos, específicamente, las percepciones y actitudes hacia estos organismos, tomando en consideración factores como la edad del pescador, el nivel educativo, el nivel socioeconómico, etc.
“El objetivo principal es generar información para la implementación de estrategias de conservación que incluyan el punto de vista de los pescadores artesanales”, señaló.
Actualmente, se encuentra en un proceso de revisión. Pronto comenzará a realizar encuestas vía telefónica para recolectar información sobre el perfil de los pescadores, y la percepción y el conocimiento que tienen estos individuos sobre los lobos marinos. También decidió realizar su investigación en San Andrés y Pucusana, para poder comparar cómo la interacción varía en ambos sitios, los cuales tienen tamaños poblacionales de lobos marinos diferentes.
“Trabajar con comunidades humanas es difícil. No suelen confiar en los investigadores. El desarrollo de proyectos así, ayuda a establecer confianza y contacto con los pescadores, y de esta manera se logran entablar futuros proyectos”, mencionó.
Encontrar aquello que te gusta
Benny también dejó un mensaje a los estudiantes que aún no han decidido qué rama seguir:
“Cuando recién ingresas a la universidad, está bien no tener todo definido. Vas a tener muchos cursos que te van a moldear y encaminar hacia tu rama. No te cierres a las oportunidades que se te presenten, alguna podría sorprenderte. No te compares con los demás, ni te desesperes en caso algo no salga de la manera en la que querías, tómatelo con calma. Consigue una actividad alterna a tu desarrollo como científico. Dedicarle tiempo a otras actividades que no sean estudiar, no te debilita, es más, te ayudan a ser más creativo, a pensar fuera de la caja y relajarte para rendir más”.